La nostalgia nos puede. Así somos en Solobasket. En un ataque de melancolía, nos hemos puesto a rememorar las mejores parejas interiores de la historia de la ACB (1983-2015). Esos duetos interiores que marcaron el devenir de la liga, bien por sus prestaciones, por su capacidad para complementarse con sus diferentes caracteristicas o por ser clave en los hitos de sus equipos. Hemos elegido treinta parejas, que iremos recordando en tres artículos. Continuamos con las parejas que hemos situado entre los puestos del 20 al 11.
Las 30 mejores parejas interiores de la historia de la ACB (I)
Las 30 mejores parejas interiores de la historia de la ACB (II)
10. GREGOR FUCKA - ROBERTO DUEÑAS (FC BARCELONA 2002-05)
La temporada 2002-03 fue histórica para el FC Barcelona. Aquella temporada el equipo azulgrana logró un triplete imposible de superar: Copa del Rey, Liga ACB y la tan deseada primera Euroliga. En esa plantilla de ensueño el juego interior estaba formada por dos veteranos que ofrecieron ese año un rendimiento espléndido: nos referimos a Gregor Fucka (2.15/1971) y a Roberto Dueñas (2.21/1975), cuatrocientos treinta y seis centímetros de pura calidad con Anderson Varejao y Patrick Femmerling guardándoles las espaldas en el banquillo.
Gregor Fucka llegó a la ACB tras una dilatada y exitosa carrera en Italia. Era un jugador diferente, muy inusual: un 2.15 muy delgado y móvil que se movía en la posición de cuatro, e incluso de tres, gracias a su atleticismo, fundamentos y buena muñeca. Era práctivamente indefendible por sus características. Cumplió un ciclo de tres años en el FC Barcelona, estrenándose a lo grande con 11.9 puntos y 6.3 rebotes en ACB. Aún jugaría una temporada más en ACB, concretamente en Girona.
Roberto Dueñas era ya todo un veterano en el FC Barcelona. Tan grande como listo en la cancha, el gigante azulgrana formó con Fucka la pareja interior más alta que jamás haya jugado en ACB. Durante el año del triplete, Dueñas sumó 10 puntos y 7 rebotes por encuentro.
9. JOE ARLAUCKAS - RAMÓN RIVAS (TAUGRÉS VITORIA 1990-93)
En la antesala de sus primeros títulos nacionales y continentales, el Baskonia dio un paso de gigante entre finales de los 80 y comienzos de los 90. De un equipo modesto de mitad de tabla, la entidad vitoriana comenzó a ser un club ambicioso que empezó a dar pasos de calidad adelante. Así, en los primeros noventa los baskonistas repitieron cuarto puesto en la liga en dos ocasiones y también alcanzaron las semifinales de la Copa del Rey. En ese primer baskonia de la década, la fortaleza de Ramón Rivas (2.10/1966) y el derroche anotador de la leyenda Joe Arlauckas (2.04/1965) marcaron a fuego el destino del club.
Tras darse a conocer en el Caja de Ronda, Joe Arlauckas aterrizó en el Taugrés en 1990, cubriendo un ciclo de 3 años espectacular. Elegido mejor jugador extranjero de la liga por la Revista Gigantes en 1992 y 1993, fue además el MVP de la Copa de 1993, a pesar de que el Tau fuese eliminado en las semifinales. Absolutamente imparable en ataque y con un instante asesino sobre la cancha como pocas veces se ha visto en la ACB, en sus tres años en Vitoria-Gasteiz firmó unos promedios de 22.1 puntos y 9.3 rebotes por encuentro en fase regular. Su mate a una mano echándose hacia delante, un icono de la liga. Del Baskonia daría el salto al Real Madrid para hacer pareja con Sabonis... una sociedad de la que hablaremos posteriormente.
El puertorriqueño Ramón Rivas fue la gran apuesta baskonista en aquella época y en su década en Vitoria-Gasteiz se convirtió en el pilar de un proyecto en constante crecimiento. Un jugador duro de roer en la zona por su enorme humanidad, fue el contrapunto al caudal anotador de Joe Arlauckas. Se perdió buena parte de la temporada 1992-93 por lesión, pero en las dos anteriores haciendo pareja con el norteamericano firmó 12.4 puntos y 9.3 rebotes por partido.
8. MIKE ANSLEY - KENNY MILLER (UNICAJA 1994-96)
En 1995 Unicaja estuvo a un suspiro de hacerse con su primera liga ACB. Fue la liga del triple de Mike Ansley (2.00/1967) que no entró en el aro azulgrana en el cuarto partido de aquellas inolvidables series finales. En ese Unicaja, el mítico Ansley formaba pareja interior (con Alfonso Reyes en la recámara) con otro jugador que dejó un grato recuerdo por tierras malagueña: Kenny Miller (2.04/1967).
Mike Ansley, autodenominado mejor cuatro de la liga, vivió dos épocas en Unicaja. Debutó en España en la temporada 1992-93 con el equipo malagueño para pasar un año en Israel y volver para triunfar en la liga en 1994. Ansley era un cuatro que alcanzaba apenas los dos metros de estatura con enorme clase y recursos ofensivos. Imparable al poste, donde aprovechaba al máximo su orondo cuerpo y sus grandes movimientos de espaldas al aro, también salía al exterior para lanzar triples con gran efectividad. Carismático y singular, su huella en la historia de Unicaja es indeleble. Fue MVP de la final de 1995 y elegido mejor extranjero de aquella temporada por la Revista Gigantes merced a los 19.8 puntos y 7.2 rebotes en liga regular. Tras dejar Málaga, pasaría por Cáceres, jugaría varias temporadas en Turquía, para volver a España para defender los colores del Ourense y acabar su carrera muy entrada la treintena en el basket polaco.
Si Ansley era la clase y el talento, Kenny Miller era el encargado de hacer el trabajo sucio en la cancha. Contundente en las cercanías del aro, no dudaba en machacar la canasta a la más mínima ocasión, intimidaba, reboteaba y ofrecía enorme intensidad ofensiva. Firmó 11.1 puntos, 8.1 rebotes y 2.3 tapones en la campaña 1994-95 y permaneció en Málaga hasta 1999 (incluyendo un esporádico paso por Galatasaray de por medio). Cambiaría la Costa del Sol por Gran Canaria para volver a Unicaja a comienzos de la primera década del presente siglo. Su último equipo en España sería el Tenerife de LEB.
7. JOHN PINONE - JUAN ANTONIO ORENGA (ESTUDIANTES 1988-93)
En la temporada 1991-92, Estudiantes firmaría la mejor campaña de su dilatada historia. Campeón de Copa del Rey en la edición de 1992, meses después Estudiantes lograría un hito que pasará a la posteridad: lograr una plaza para la F4 de la Liga Europea. En aquel inolvidable equipo destacaba un juego interior formado por dos auténticas leyendas de la liga: John Pinone (2.02/1961) y Juan Antonio Orenga (2.06/1966).
John Pinone es uno de los jugadores que con más cariño es recordado por la afición estudiantil. Mientras que David Russell y, posteriormente, Ricky Winslow ponían los puntos y el espectáculo con sus infinitos vuelos, este poste de apenas dos metros de altura ponía su inteligencia al servicio del equipo. Un americano atípico con unas condiciones físicas que distaban mucho de las de los dioses de ébano que inundaban las carpetas de los escolares. Durante prácticamente una década (1984-93) "Pinoso" fue capital en los logros de Estudiantes. MVP de la Copa del Rey de 1992, superó durante su carrera ACB los 12.000 minutos y los 6.000 puntos con unos promedios de 18.6 puntos y 6.6 rebotes.
Juan Antonio Orenga llegó a Estudiantes a finales de los 80 y creció como jugador bajo la tutela de John Pinone. Duro defensor y con un excelente tiro a media distancia, su importancia en el juego estudiantil fue creciendo exponencialmente. MVP de la final de la Copa de 1991 (en la que Estudiantes cayó ante el FC Barcelona) y elegido mejor defensor del año por la Revista Gigantes ese mismo año. Es otro histórico de la liga con más de 12.000 minutos disputados y los 2.500 rebotes recogidos durante su carrera.
6. FERNANDO MARTÍN - WAYNE ROBINSON (REAL MADRID 1983-86)
En los mejores años como jugador del Real Madrid del añorado Fernando Martín (2.05/1962), el legendario pÍvot español tuvo como pareja interior a Wayne Robinson (2.05/1958), uno de los norteamericanos que mejor recuerdo dejaron en "La Casa Blanca". Con este dueto y Fernando Romay cubriéndoles las espaldas, entre 1983 y 1986 el Real Madrid se haría con tres títulos ACB consecutivos, dos Copa del Rey (1985 y 86), una Recopa (1984) y un subcampeonato en la Copa de Europa (1985).
Wayne Robinson era un jugador felino que llegó al Real Madrid tras dos temporadas en Italia. Trabajador, gran reboteador y hombre de equipo, era enormemente atlético y móvil (dos veces subcampeón del concurso de mates de la ACB por detrás de David Russell). En sus tres campañas como madridista firmó 14.8 puntos y 7.7 rebotes por partido en liga regular. Posteriormente pasaría por Cacaolat Granollers y, tras un parón obligado por problemas cardíacos, volvería a España en los noventa, disputando una temporada en Manresa y otra más en el Juventud Alcalá de 1ª B.
¿Qué podemos decir de Fernando Martín que no se haya dicho anteriormente? Un deportista de primera, un jugador que hubiera podido destacar en cualquier otra especialidad que marcó un antes y un después en el baloncesto patrio. En esta época, en la que coincidió con Robinson, ofrecería su mejor baloncesto, lo que le llevaría en el verano de 1986 a ser el primer jugador español en disputar la NBA. En ese ciclo sumaría 21.4 puntos y 7.2 rebotes por partido en liga regular.
5. RICKY BROWN - ARVYDAS SABONIS (REAL MADRID 1992-93)
El reinado del Zar Arvydas Sabonis (2.22/1964) en el Real Madrid dio comienzo en 1992. En su primer año, el gigante lituano haría pareja con un veterano de la talla de Ricky Brown (2.06/1958), que había aterrizado en el club blanco el curso anterior para convertirse en el héroe de la consecución de la Recopa del 1992. En la temporada 1992-93, el Real Madrid lograría el doblete en Copa y Liga.... y lo que quedaba por llegar.
Ricky Brown estaba ya entonces bien entrado en la treintena (34) pero continuaba rindiendo a alto nivel. Llegó a España de la mano de Caja de Ronda tras coronarse campeón de Europa con el Tracer de Milán. Tras volver a Italia, regresó a la ACB con el Real Madrid. Tras una gran primera temporada, en su segunda campaña como blanco sería el escudero de Arvydas Sabonis, aportando toda su experiencia y calidad en la pista. Sus promedios en ACB alcanzarían los 16.4 puntos y 8.3 rebotes en temporada regular.
Tras varias campañas en Valladolid rindiendo a un enorme nivel, era el momento para Arvydas Sabonis de dar el paso para reinar en Europa con el Real Madrid. Su estreno en el club blanco no pudo ser mejor: fue elegido MVP de la liga, de la final ACB y también como el mejor jugador europeo del año según la FIBA. Además, se hacía con los primeros títulos colectivos en España (Liga y Copa), promediando 17.1 puntos, 11.5 rebotes y 2 tapones por encuentro en fase regular.
4. CORNY THOMPSON - FERRÁN MARTÍNEZ (JOVENTUT 1990-94)
Durante la primera mitad de la década de los 90 el Joventut vivió su época más dorada. En los primeros noventa el Joventut se llevaría dos títulos ACB (1991 y 1992) y una histórica Liga Europea (1994), que hubieran podido ser dos si no hubiera sido por aquel triple de Sasha Djordjevic en la final de 1992. En ese tiempo, la Penya contaría en la zona con una pareja interior que atesoraba una calidad superlativa: Corny Thompson (2.02/1960) y Ferrán Martínez (2.12/1968).
Corny Thompson venía a Badalona alcanzada ya la treintena y tras llegar a convertirse un mito viviente en Varese. Aunque otros jugadores que venía con gran cartel de pallacanestro no cuajaron en ACB (por ejemplo Greg Stokes en el propio Joventut), en el caso de Corny Thompson no fue así. Un jugador de enorme clase, con las rodillas maltrechas pero con calidad a paladas. daba clínics semanales por los parquets españoles y de media Europa. Enormes movimientos de espaldas al aro, capacidad de abrir campo con su tiro exterior, un IQ sobresaliente y un tesón y un liderazgo admirables para uno de los mejores norteamericanos que hayan pisado las canchas de la ACB. En sus cuatro temporadas en La Penya promediaría 11.8 puntos y 7.9 rebotes en fase regular de la liga española. Fue nombrado MVP de la final de la ACB en 1991. Tras su paso por Badalona, aún disputaría dos temporadas más en España defendiendo los colores del León.
Ferrán Martínez puede ser considerado como el pívot español de los noventa por autonomasia (con permiso de Antonio Martín y Roberto Dueñas). Salió del FC Barcelona para explotar de forma definitiva en Badalona, demostrando todo el basket que llevaba dentro. Poco espectacular y atlético, pero con una muñeca de seda y gran IQ, formó con Thompson una pareja que no era capaz de saltar por encima de un listín telefónico pero que derrochaba clase por los cuatro costados. En sus cuatro temporadas (aunque en la 1991-92 se perdió buena parte de la campaña por una grave lesión) en La Penya firmó 11.2 puntos y 6.3 rebotes en ACB. Posteriormente regresaría al FC Barcelona para acabar su carrera vestido de nuevo de verdinegro.
3. LUIS SCOLA - TIAGO SPLITTER (TAU CERÁMICA 2003-07)
Luis Scola (2.06/1980) está sin duda en el Top5 de los mejores interiores que jamás hayan jugado en España. Tras foguearse en Gijón, defendió los colores del Baskonia durante siete temporadas. Primero, creciendo a la sombra de Oberto y Tomasevic y después siendo el líder del conjunto gasteiztarra. Durante varias temporadas coincidió con su delfín en el equipo de Josean Querejeta: Tiago Splitter (2-12/1985). Juntos formaron una pareja inolvidable.
Tras la marcha de la dupla Oberto-Tomasevic, Luis Scola se convirtió en el referente del juego interior baskonista teniendo como escudero durante sus varias temporadas al magiar Kornel David. Mientras, se cocinaba a fuego lenta la nueva perla baskonista, Tiago Splitter, que si bien debutó en 2003 en ACB no fue hasta la última temporada de Scola en Vitoria-Gazteiz cuando explotó como pívot de referencia. En esa campaña 2006-07, Luis Scola firmaría 14.8 puntos y 7.2 rebotes, mientras que Splitter, en su primer año como titular, promediaría 11.3 puntos y 5.4 rebotes por partido. Un MVP de la liga le daba la alternativa a un futuro MVP de la competición.
2. FABRICIO OBERTO - DEJAN TOMASEVIC (TAU CERÁMICA 2001-02 Y PAMESA 2002-2005)
Se reunieron por primera vez en el Baskonia y su relación se extendió también al Pamesa Valencia. Fabricio Oberto (2.08/1975) y Dejan Tomasevic (2.08/1973), la pareja interior que mejor ha entendido y leído el juego de la historia de la ACB. Dos auténticas mentes privilegiadas a las que daba gusto verles jugar. Una compenetración espectacular y un juego de pases sublime. Lograron la dupla Copa del Rey y Liga ACB con el Tau (2002) y con el Pamesa se harían con la ULEB y lograrían un subcampeonato de liga (2003).
Tras una primera experiencia europea desalentadora, Tau Cerámica Baskonia logró recuperar para el basket de primer nivel al argentino Fabricio Oberto. Un jugador muy atlético y gran conocedor del juego que marcó época en la ACB. En su año del doblete en ACB con Baskonia, firmaría 11 puntos y 6.3 rebotes por encuentro. Posteriormente firmaría por el Pamesa, con un primer año magnífico: final de la ACB registrando 12.8 puntos, 5.2 rebotes y 2 asistencias en liga regular y título de la ULEB Cup.
Dejan Tomasevic llegó a Baskonia 2001 tras espectacular campaña en el Budcnost, promediando +20 puntos y +10 rebotes en Euroliga. Su impacto fue inmediato en Vitoria. MVP de la Copa del Rey y elegido en el Quinteto Ideal de la Euroliga, promedió en ACB 11.4 puntos, 6 rebotes y 2 asistencias por encuentro. En su paso por el Pamesa Valencia acentuó su capacidad de pase, logrando el cuarto triple doble en la historia de la liga con sus 14 puntos, 13 rebotes y 10 asistencias en los playoffs de 2004 ante Unicaja. Fue MVP de la final de la ULEB Cup de 2003 en una primera temporada en Valencia en la que promedió en ACB 11.6 puntos, 6.4 rebotes y 4.4 asistencias por encuentro.
1. JOE ARLAUCKAS - ARVYDAS SABONIS (1993-95)
Llegamos al número uno de este ranking con una dupla que creemos lográ el consenso general. Nos referimos a la pareja formada por Joe Arlauckas (2.04/1965) y Arvydas Sabonis (2.22/1964). Si bien el Zar lituano tuvo a su lado durante sus años en España a grandes jugadores, con Arlauckas se logró unir al mejor cuatro y al mejor cinco de toda la ACB. Se ensamblaban dos piezas perfectas que darían al Real Madrid su tan ansiada Euroliga (1995), además de la Copa y la Liga ACB en 1994.
La primera temporada del anotador norteamericano y del gigante lituano fue muy excelente en el Real Madrid; el segundo rozó la perfección. Con una plantilla sorprendentemente limitada (Antúnez, Lasa, Santos, García Coll...), el juego del Real Madrid pasaba por las manos de estas dos hombres franquicia. Arlauckas firmaba en aquell campaña 1994-95 19.9 puntos y 6.8 rebotes por partido, mientras que Sabonis se iba a los 22.9 puntos y 13.2 rebotes por partido. En esos dos años, Sabonis sería dos veces MVP de la ACB, una de la final de la ACB y también sería elegido mejor jugador de la F4 de la Euroliga de 1995. Una vez logrado su anhelada Euroliga, Sabonis marcharía a la NBA, mientras que Arlauckas permanecería de blanco hasta 1998, logrando proezas como los 63 puntos que le endosó a la Buckler de Bolonia en Euroliga en 1996.